Cree en tu Patria, dominicano,
cree en su historia, y cree en ti;
cree en sus campos, verdes y hermosos,
cree en la gente que nació aquí.
No se apodere de ti el cansancio,
ni el desaliento nuble tu faz:
¡Alza los brazos, trabaja y crea,
surca la tierra, siembra la paz!.
Abre tus brazos a tus hermanos,
triunfa del odio con la bondad;
olvida agravios, sonríe y ama,
que Dios nos pide fraternidad.
Mira adelante con fe ardorosa,
siembra esperanza, siembra virtud,
que hay un pasado de lucha y gloria
que anuncia días de plenitud.
¡CREE EN TU PATRIA, DOMINICANO,
CREE EN SU HISTORIA Y CREE EN TI!